
El mundo de la moda rápida ha cambiado drásticamente en los últimos años, y una de las víctimas de esta transformación ha sido Forever 21, que recientemente anunció su segunda quiebra en menos de seis años. Aunque sus tiendas físicas y su comercio en línea siguen operando con normalidad, la empresa ha decidido acogerse nuevamente al Capítulo 11 en Estados Unidos, una medida que busca facilitar su reestructuración y encontrar un comprador para sus activos.
Esta situación plantea preguntas inevitables: ¿Por qué se declara en quiebra nuevamente? ¿Qué papel juegan sus competidores en esta crisis? ¿Es posible que la marca sobreviva a este nuevo golpe financiero?
Forever 21 y su Segunda Quiebra: ¿Qué Pasó Esta Vez?
El operador F21 OpCo, responsable de gestionar la marca, ha señalado varios factores clave que han llevado a la empresa a esta situación. Entre ellos destacan:
📌 Altos costos operativos y problemas logísticos, que han complicado la rentabilidad de la empresa.
📌 Disminución del tráfico en centros comerciales, lo que ha reducido sus ventas físicas.
📌 Competencia feroz de gigantes del comercio electrónico, como Shein y Temu, que han revolucionado la moda rápida con precios bajos y estrategias digitales agresivas.
📌 Dificultades económicas que afectan a su base de clientes, quienes han reducido sus gastos en moda ante la inflación y la incertidumbre financiera.
Ante este panorama, la empresa decidió acogerse a la quiebra voluntaria bajo el Capítulo 11 en el Tribunal de Quiebras de Delaware, con la esperanza de reorganizar sus operaciones y encontrar una salida viable.

El Impacto de Shein y Temu
Uno de los principales factores que han llevado a la quiebra es el ascenso de Shein y Temu, dos marcas chinas que han redefinido la industria de la moda rápida a nivel mundial.
¿Cómo lograron estos gigantes superar el mercado?
🔹 Precios ultracompetitivos: Gracias a sus modelos de producción y venta directa al consumidor, Shein y Temu pueden ofrecer ropa a precios que Forever 21 no puede igualar sin afectar sus márgenes de ganancia.
🔹 Exención de impuestos: Se han beneficiado de la exención de minimis en EE.UU., que permite importar productos con un valor menor a $800 sin pagar impuestos, reduciendo costos de manera significativa.
🔹 Estrategia digital agresiva: Han optimizado su presencia en redes sociales y comercio electrónico, conectando mejor con las nuevas generaciones de consumidores.
En contraste, Forever 21 no ha logrado adaptarse con la misma rapidez, lo que ha resultado en una pérdida de competitividad.
En Busca de un Comprador: ¿Sobrevivirá la Marca?
A pesar de la quiebra, La marca no desaparecerá de inmediato. La empresa continuará operando mientras busca un comprador que pueda adquirir sus activos y darle una segunda oportunidad en el mercado.
En este proceso, la marca ha anunciado descuentos masivos en su tienda en línea, con promociones de hasta el 80% en toda la tienda y hasta un 70% en artículos seleccionados.
Pero, ¿hay realmente un futuro para Forever 21?
Jarrod Weber, presidente global de estilo de vida de Authentic Brands Group (propietaria de la marca), ha señalado que la situación actual no afectará la propiedad intelectual, ni su negocio internacional. Según Weber, esto representa una oportunidad para modernizar la distribución y fortalecer su modelo de venta.
Forever 21 en México y el Resto del Mundo: ¿Qué Pasará con sus Tiendas?
Mientras en Estados Unidos la situación es incierta, en México y otros mercados internacionales Forever 21 seguirá operando con normalidad. Actualmente, la marca cuenta con 37 tiendas en México, y la empresa ha asegurado que no hay planes de cierre en el país.
📌 ¿Por qué las operaciones internacionales no se ven afectadas?
Porque funcionan de manera independiente, con estrategias de negocio adaptadas a cada mercado.
Esto significa que, aunque Forever 21 se declara en quiebra en EE.UU., sus tiendas en México seguirán ofreciendo sus productos y promociones habituales, sin interrupciones en el servicio.

El Historial de Problemas Financieros
La quiebra de Forever 21 no es un caso aislado. La empresa ya había enfrentado serios problemas financieros en 2019, cuando se declaró en bancarrota por primera vez.
En aquel entonces, la marca cerró numerosas tiendas en todo el mundo e intentó reestructurar su modelo de negocio. Sin embargo, los cambios implementados no fueron suficientes para garantizar su estabilidad en el mercado estadounidense.
¿Qué falló en la estrategia?
🔹 No logró adaptarse rápidamente a la transición digital: Mientras Shein y Temu crecían con una estrategia 100% en línea, Forever 21 mantuvo un modelo dependiente de las tiendas físicas.
🔹 No pudo competir en precios: La estructura de costos de Forever 21 no le permitió igualar los precios ultrabajos de sus competidores asiáticos.
🔹 Problemas de gestión y deuda acumulada: La compañía arrastraba problemas financieros desde hace años, lo que limitó su capacidad de inversión en innovación y expansión.
¿Qué Puede Aprender la Industria de la Quiebra de este retailer de la moda?
El caso de Forever 21 deja varias lecciones clave para las marcas de moda y el sector minorista en general:
📌 La digitalización es clave: El comercio en línea ya no es una opción, sino una necesidad para cualquier marca que quiera mantenerse competitiva.
📌 Los modelos de negocio deben ser ágiles: La capacidad de adaptación a los cambios en el mercado es esencial para la supervivencia empresarial.
📌 La competencia global es feroz: Las empresas deben estar preparadas para enfrentar a nuevos jugadores que pueden surgir con propuestas más innovadoras y accesibles.
¿Es el Fin de Forever 21?
Eso dependerá de si logra encontrar un inversionista con una visión clara para modernizar su modelo de negocio, fortalecer su presencia digital y competir eficazmente contra gigantes como Shein y Temu.
Esta segunda quiebra en menos de seis años refleja los enormes desafíos que enfrenta la industria de la moda rápida. Aunque la marca sigue operando y busca un comprador, su futuro es incierto.
Por ahora, Forever 21 sigue en pie, pero la pregunta sigue en el aire: ¿podrá reinventarse o será otra víctima más de la transformación del retail?